ESCRITOS INÉDITOS DE ALICE BAILEY
CHARLA A LOS ESTUDIANTES DE LA ESCUELA ARCANA
En
estos escritos inéditos tenemos un diálogo con A.A.B., sobre todo interesante
para los estudiosos del Maestro D.K. y A.A.B. (ACV)
Viernes, 23 de abril de 1943
¿Podríamos finalmente tratar algunos de los temas que tienen que
ver con las escuelas esotéricas del futuro?
AAB: Se está refiriendo a Cartas sobre Meditación Ocultista.
Creo que la Escuela Arcana es previa a las escuelas preparatorias, y no creo
que vayamos a tomar en la Escuela un entrenamiento especializado para la
iniciación, porque eso es para lo que son las escuelas especializadas. Tengo
esta cuestión en mente porque no estoy segura de que haya suficientes personas
en el mundo para organizar y poner en marcha esas escuelas. El Tibetano nos
dijo hace diez o doce años que había solo 400 discípulos en el planeta.
Recientemente nos dijo que el número había aumentado a miles. Si en pocos años
hemos saltado de tres cifras a cuatro, debe representar un tremendo paso
adelante para la raza. Esos números en relación con los billones de seres
humanos es un porcentaje tan pequeño que difícilmente cuenta, y no contaría
para nada si no fuera por el hecho de que los discípulos aceptados (los de
larga data, no los aceptados recientemente) que trabajan conscientemente,
ejercen el poder en proporción a su número. El único discípulo aceptado que
realmente llega a algo y se convierte en una fuente de poder es el que ha
salido del centro dramático de su propia vida. Pueden tener sus momentos de
introspección, y egoísmo pero sus vidas se han exteriorizado y no están
interesados en ellos mismos. El principiante nunca olvida que él es un
discípulo aceptado. Es todo tan nuevo para él. Le lleva mucho tiempo superar el
interés del Maestro por él. Cuando ese es el caso él se abre como un vórtice de
fuerza, y eso es por lo que el discípulo medio al comienzo es tan terrible.
Cada falta que tiene es traída a la superficie y exteriorizada, y lo bueno que
hace a menudo es negado porque la personalidad está sobre estimulada por el
discipulado.
No creo que las escuelas ocultistas sean fundadas hasta que
hayamos asimilado y utilizado la información que tenemos ahora y que ahora
sabemos que es el ABC. Sé que hay un montón que sé que no he utilizado. Hay
información y conocimiento en mi cabeza que no he utilizado en el plano físico.
Eso es verdad en relación con cada uno de nosotros. En conexión con nuestras
debilidades sabemos cómo deshacernos de ellas y sin embargo no lo hacemos.
Estamos cansados; la vida espiritual es tremendamente fatigosa. No sé si todos
estarían dispuestos a escribir en el espacio de una página lo que piensan
acerca de lo que significa para ustedes la iniciación, lo que sería para
ustedes dar el siguiente paso. Podríamos reunir las respuestas y ponerlas en
The Beacon. Aquí hay un grupo de personas que han tenido mucha enseñanza sobre
el discipulado, y nosotros somos discípulos de un grado u otro, y en el momento
en que se reclama humildemente que se es un discípulo, en ese momento se tiene
realmente que decir a su Alma y a los otros discípulos, “Estoy preparado para
la iniciación”. Eso es lo que tienen que decir, y es un pensamiento
tremendamente solemne. El momento en el que salimos del rango de aspirantes y
adoptamos cierta posición en nuestras mentes – que somos discípulos – en ese
momento hemos dicho, “Vamos a tomar la iniciación y a anunciar a los discípulos
de nuestro propio rango que vamos a tomar la iniciación”.
Aquí hay algunos párrafos de los escritos inéditos del Tibetano
[NT: publicados posteriormente en DNE I, p. 86, ed. inglés]:
Por lo tanto, ¿a qué está dispuesto el iniciado? A reconocer
instantáneamente lo nuevo…
No está tratando de la purificación, de la construcción del
carácter, del conocimiento técnico académico. Ustedes tienen que tener eso para
interpretar lo que es nuevo:
A captarlo inmediatamente y dar un nuevo paso para desarrollar
la conciencia humana precursora y revelar los nuevos y subsiguientes conceptos
que constante e inevitablemente se le presentan, los cuales poseen el poder
expulsor dinámico y satisfacen debidamente la necesidad humana del ciclo
inmediato. También está dispuesto a abandonar instantáneamente cuanto parece
inútil, innecesario o inadecuado para la necesidad del momento, a recibir desde
lo alto el poder que rompe y destruye lo que se ha cristalizado, y es anticuado
e inútil porque ya ha servido a su propósito; está dispuesto a trabajar como
ocultista práctico (no como místico idealista) en los niveles de la visión y en
el de los asuntos prácticos humanos.
El secreto de la revelación es que la revelación solo llega a
aquellos que son reveladores. Eso es un iniciado. Al leerlo casualmente hubiera
dicho que eran instrucciones para los discípulos. Cuanto más pensaba en ello
más cuenta me daba de que eran más que eso.
La iniciación puede ser definida en este punto como el momento
de crisis en el que la conciencia se cierne en el límite de la revelación.
El iniciado es el hombre que ha respondido a la enseñanza, la ha
reconocido intuitivamente, y además ha dado el siguiente paso que le conducirá
del límite de la revelación a la revelación.
Quizás se consideren las demandas del alma y las sugerencias del
Maestro, como antagónicas a las demandas de tiempo y espacio, centradas en la
personalidad u hombre inferior. Por consiguiente, en esta situación los pares
de opuestos ejercerán una enorme atracción; el campo de tensión o el foco de
esfuerzo reside en el discípulo “que se encuentra en el punto medio”.
¿Responderá o reaccionará conscientemente a la atracción superior y pasará a
nuevas y superiores zonas de experiencia espiritual? O ¿se hundirá nuevamente
en el espejismo del tiempo y del espacio y en la esclavitud de la vida
personal? ¿Se mantendrá en condición pasiva y estática donde no le afecten la
tendencia superior ni la atracción inferior?
¿Responderá y reaccionará conscientemente al tirón, caerá en el
espejismo del tiempo y el espacio, o permanecerá en una condición estática y
pasiva? Una y otra vez me encuentro con personas que están en esa condición
estática y pasiva, y sé que si dieran el paso más allá del límite tomarían la
iniciación.
Una de estas tres condiciones debe caracterizarlo y deriva de
una vacilante experiencia anterior, donde el discípulo vibra entre la decisión
superior y la inferior. El Maestro preside este proceso, en el que nada puede
hacer, porque el problema debe resolverlo el discípulo. Solo podrá intensificar
el deseo del alma mediante el poder de Su pensamiento dirigido. La personalidad
nada puede hacer, porque en esta etapa el cuerpo físico y el vehículo astral
son simples autómatas que esperan responder a la decisión del discípulo que
actúa en su cuerpo mental.
Los tres aspectos de un ser son: Alma, Personalidad, Discípulo.
La correspondencia en el discipulado es: Mónada, Alma, Personalidad. Es el Alma
en su propio plano, el discípulo en un punto de fusión, y entonces está la
personalidad de la que el discípulo es consciente. Creo que es un punto que
deberíamos debatir un poco porque es un punto esotérico extremadamente
importante.
En esta etapa de esfuerzo el discípulo puede actuar únicamente
en el nivel mental de la conciencia. Una vez hecho, la suerte está echada. O
avanza hacia el portal de la luz donde el Maestro le toma de la mano, y el
Ángel de la Presencia se hace potente y activo en forma indescriptible, o
retrocede temporalmente a las condiciones de vida del hombre inferior;
espejismo y maya descienden nuevamente sobre él y el Morador en el Umbral se
interpone entre el discípulo y la luz que afluye por el portal, renovando sus
actividades. El discípulo despierta súbitamente a una más amplia captación de
la realidad y a una más profunda comprensión del Plan y de la parte que le
corresponde desempeñar en él, o “los velos de la tierra” se cierran sobre su
cabeza; entonces la visión se desvanece y retoma la vida de un ser humano
común, probablemente durante todo el período de la encarnación en la que se le
ofreció la oportunidad. No obstante, si traspusiera el portal, entonces (de
acuerdo a la iniciación correspondiente) así será la revelación y las
consecuencias resultantes. No se le revelarán posibilidades. Es una experiencia
efectiva cuyo resultado es la evocación de nuevos poderes y capacidades y el
reconocimiento de nuevos métodos y campos de servicio. Tales poderes están
condicionados por los desarrollos anteriores y la presencia de estas
facultades, concediéndose además la plena libertad de movimiento “dentro de los
límites” de la Jerarquía que está más allá de lo que él pudo haber soñado.
Grandes crisis en el límite de la revelación. El iniciado
permanece indeciso en el límite. Tenemos que llegar en nuestras mentes a una
definición del punto de crisis en el que la conciencia se cierne al borde la
revelación. Las tres condiciones son: ¿responderá, caerá de nuevo o permanecerá
en una condición estática y pasiva?
La crisis, ¿viene accidentalmente o la forzamos? ¿Cómo se va a
producir la crisis?
AAB: De ambas formas, nada accidental, desde las circunstancias,
las condiciones en las que vive el discípulo y porque el verdadero discípulo
siempre fuerza la situación. Así que muchos no fuerzan la situación. El reino
de los cielos es tomado por la fuerza. La violencia, el forzar la situación,
falta en muchos casos.
La iniciación, la crisis, la revelación – lo que me ha
interesado en lo que está haciendo el Tibetano es que él ha cambiado nuestra
concepción sobre la iniciación, que era una concepción muy material. En toda
esa enseñanza hay dos notas excepcionales – una es el énfasis sobre la
construcción del carácter, y la segunda es lo que hace un Maestro a un
discípulo para convertirle en un iniciado. La verdad es que un Maestro no hace
nada; él solo vela por el discípulo a medida que avanza a través de sus
dificultades. El discípulo mismo, el iniciado mismo, provoca la crisis porque
es un iniciado y un vórtice de fuerza, y cuando se utiliza correctamente un
punto de crisis, entonces el iniciado pasa por encima del límite, en cuyo punto
tantos permanecen pasivos, y tiene lugar la revelación.
¿No creen que un discípulo tiene que merecerse la crisis?
AAB: Se puede plantear de esa manera. ¿Cómo se merece la crisis?
Por el servicio, entregando la enseñanza, por la intensa
aspiración, la vida completa dirigida hacia ese único punto.
AAB: Dos condiciones gobiernan la iniciación: el servicio y su
relación con los tres mundos. Pero el iniciado está lidiando correctamente con
eso que no es de los tres mundos – con la vida de las personas fuera de los
tres mundos en general.
¿Usted cree que se puede llegar a ser un iniciado si no se ha
servido a la Jerarquía?
AAB: Esa es la ley, pero no sería suficiente, porque el mundo
está lleno de servidores que se suicidan con el servicio. El servicio a la
Jerarquía no es suficiente. Lo que más me afectó en la Sociedad Teosófica es
que es un gran grupo de devotos fanáticos que creen en la Jerarquía y están
ocupados con la Jerarquía, pero nunca me encontré un iniciado en la ST. Sería
interesante saber cuál es el otro requisito. Un sentido de aspiración para llegar a ser
iniciado, “hollar el Sendero en base al trabajo que realizo”, auto abnegación.
Uno inicia cosas y las lleva adelante.
AAB: ¿Qué le anima a iniciarlas?
Estoy identificada con el todo. Voluntad, interés, ausencia de
deseo, no la voluntad que dirige, sino la voluntad que permanece.
AAB: Tenemos servicio, aspiración, la voluntad que permanece.
¿Qué más se puede pedir?
Revelación.
AAB: La revelación es la recompensa.
Identificación.
AAB: Sensibilidad a lo desconocido.
RK: Eso podría ser instinto espiritual.
Muchas personas son sensibles a lo desconocido.
AAB: Depende de lo que lo desconocido sea para ustedes.
Significa mucho más que eso. Hay ciertos factores en su mente tales como
experiencia, aspiración por supuesto, servicio por supuesto, voluntad fija,
orientación, identificación, pero no hay identificación hasta después de la
tercera iniciación cuando hay unificación. Creo que estamos por debajo de ese
nivel. Identificación, sí, pero eso se aplica a las iniciaciones mayores. No
tengo ni la más remota idea de lo que significa.
Volviendo a la sensibilidad a lo desconocido, para el discípulo
probacionista – el auténtico discípulo probacionista que ha trabajado en la
construcción del carácter, en la purificación, en el desarrollo mental y el
control de las emociones – el Maestro y el Ashrama del Maestro es lo
desconocido, y él consigue ser progresivamente sensible al mismo. Llega a ser
más y más sensible a las impresiones procedentes del Maestro hasta que
gradualmente lo desconocido llega a ser un hecho conocido en su experiencia y
se convierte en parte del Ashrama que siempre lo ha envuelto, pero él no lo
sabía. Entonces es un iniciado. ¿Y ahora qué? Creo que deberíamos llegar a ser
un grupo basado en los hechos y trabajar en una vuelta superior de la espiral.
RK: Con la Jerarquía.
AAB: Con la Jerarquía y el Plan.
N: Cuando una persona llega a ser amor manifestado en el plano
en el que mora, se vuelve sensible a lo desconocido. Cuando esta actitud se
aplica a todos los problemas de la vida, me parece que las cosas a las que
llegamos a ser sensibles no tienen nada que ver con los aspectos inferiores. Me
parece que el amor hace a una persona porosa a lo desconocido.
AAB: Básicamente tiene toda la razón, pero nunca llegará a ser
iniciado siendo amoroso.
N: Creo que también debería haber sabiduría y actividad
dinámica.
AAB: ¿De dónde viene entonces la mente?
N: La mente es el agente activo del aspecto amor, y cuando la
sensibilidad está abierta a las ideas elevadas del Plan, la mente debe ponerse
inmediatamente en acción. La voluntad debe asistirla, pero el amor siempre la
fusiona y la mantiene viva.
ABB: Tiene mucha razón.
RK: Hablando sobre el aspecto vida, que reemplaza al aspecto
amor después de la tercera iniciación, usted menciona la tercera iniciación
porque en la tercera iniciación el amor funciona vía la mente. Esto es lo que
buscamos a tientas después en el Cuarto Grado – la Vida, la Mónada.
AAB: Entonces ustedes tienen la perfecta manifestación de la
deidad que nunca antes había aparecido en la Tierra, ni incluso en Cristo. La
próxima gran raza producirá una Jerarquía y un grupo de Maestros que distará
mucho de la actual porque distaremos mucho de lo que somos ahora, y el Cristo
habrá pasado a dar el siguiente paso y tendremos a Su sucesor.
N: Estaremos tan lejos del Cristo como lo estamos ahora.
AAB: Nunca vamos a ponernos al día con Él. Por supuesto, todas
esas diferenciaciones son diferenciaciones de la mente. Solo existen en tiempo
y espacio.
Lo que quiero ver funcionar en este grupo es una serie de
reconocimientos y no esta vaguedad que tenemos. Hablamos vagamente sobre la
vida, el amor y la iniciación, pero esas cosas en realidad no son vagas.
VH: La vida es bastante vaga.
AAB: No sabemos nada de ella. El iniciado de tercer grado está
empezando a saber lo que es.
RK: Cuando empezamos a trabajar con la vida, interviene el
propósito, y la cualidad del propósito determina la realidad de la vida. La
vida está caracterizada por un propósito aunque aparentemente no lo esté.
Siempre funciona hacia Dios – propósito en un propósito.
AAB: Hay algunas de las ideas que vagamente tenemos que al final
nos conducen a la revelación si las seguimos. Me gustan las palabras que
utiliza el Tibetano: Vida, Cualidad, Apariencia. Son las más fieles a todo el
tema.
JL: ¿Quién toma la iniciación? El discípulo toma la iniciación.
La personalidad no tiene nada que ver con esto; el Maestro no tiene nada que
ver tampoco; el Alma no hace nada hacia ella. ¿Quién es el discípulo?
AAB: Personalidad, Discípulo, Alma – lleguen a sus conclusiones.
En el arco descendente el Alma fue iniciada continuamente en la materia hasta
que alcanzó su iniciación mayor, que fue la individualización. ¿Han pensado
sobre ello en términos de iniciación? ¿Qué se individualiza? Un centro de vida
que estaba formado de cualidad y substancia juntas. Ese centro de vida es el
individuo, y entonces ciclo tras ciclo ese individuo pasó iniciación tras
iniciación. Cada vez, uno de los cinco sentidos llego a ser una realidad
funcionante que era una iniciación del individuo. Al observar a un niño cuando
por primera vez oye, toca, ve, degusta y huele, están viendo como tiene lugar la
iniciación. Entonces viene otra iniciación después de que el individuo haya
entrado en el Atrio de Aprendizaje y adquirido conocimiento y egoísmo; por
medio del conocimiento y el egoísmo el individuo fue iniciado en la naturaleza
de los tres mundos y su conciencia se expandió gradualmente hasta que el
individuo fue iniciado en el camino físico de la vida y en el camino emocional
y en el mental. Porque estamos hechos de sustancia del Alma y de la vida es por
lo que el individuo toma la iniciación.
C: Creo que el individuo es una mota de la Vida Una, y la Vida
Una está tomando la iniciación de manera poco sistemática.
AAB: Esa es una teoría, y en la iniciación no hay teoría. Nadie
sabe lo que es la vida. La iniciación es un hecho, y deseo que ustedes logren
esta gran síntesis y graduación en el arco descendente y ascendente y lleguen a
las cinco grandes iniciaciones. La razón de que estemos teniendo tantas
incorporaciones al rango de discípulos es porque el Uno en el que vivimos, nos
movemos y tenemos nuestro ser está pasando una nueva iniciación y las células
individuales en Su cuerpo están avanzando para dar su siguiente paso.
Personalmente no comprendo nada sobre el aspecto vida, y no creo que nadie lo
comprenda excepto los iniciados de cuarto, quinto y sexto grado, y ellos nunca
hablan de ello porque saben que es una pérdida de tiempo. Así que solo tenemos
la parte teórica.
VH: ¿Entonces la iniciación prosigue incesantemente?
AAB: No sé. En Yoga Tibetano y Doctrinas Secretas (por W.Y.
Evans-Wentz) hay un sendero de iniciación superior, y el Tibetano nos dice que
la iniciación es solo un experimento en este planeta. No sé lo que es la
iniciación, porque no se puede saber a menos que se sepa cuál es la meta de
todas las iniciaciones. Todo lo que se puede hacer es aplicarlo al siguiente
paso adelante.
Una de las cosas más valiosas que puede hacer un discípulo es
saber lo que sabe y lo que no sabe. El problema con tantos discípulos es que la
aspiración ha adelantado a la capacidad de comprender. Deseo que este grupo
logre hechos y no trate con temas que no podemos comprender.
El Cristo nunca tomó iniciaciones; Jesús las tomó. En el momento
de las cinco grandes crisis el cuerpo no era el Suyo sino el de Jesús. No era
una cuestión de personalidad. Todo el tema es uno de los misterios más
profundos.
RK: Rudolf Steiner tiene un libro sobre Jesucristo.
AAB: El aporta una presentación muy material. Me parece que ha
confundido el aspecto conciencia de la divinidad con el Cristo histórico y ha
hecho que el Cristo histórico resumiera en Sí mismo el Segundo Aspecto de la
divinidad por completo, por eso nadie antes o después podría repetirlo. En
realidad el Cristo dijo: “las cosas que hago, haréis, y cosas mayores haréis
porque Yo voy al Padre”.
AP: Nunca ha sido y nunca volverá a ser.
AAB: Ha sido antes. La única diferencia entre Cristo y los
grandes instructores anteriores o entre el Buda y los instructores previos fue
que la emergencia de los tiempos requería un enfoque de poder, y ellos fueron
los únicos capaces de recibirlo. Creo que estamos a punto de verlo otra vez
porque el aspecto voluntad tiene que enfocarse en algo.
AP: Iniciación para mí significa sucesivas expansiones de
conciencia y llegar a ser eso de lo que se llega a ser consciente, una tras
otra, y cuando tomas una llegas a ser eso y sabes lo que eres y lo que es.
Volviendo a donde estamos, lograr una concepción de la vida y del amor y de la
sabiduría y entonces convertirnos en ello, y después dar el siguiente paso.
AAB: Eso es lo que quiero decir con sensibilidad a lo
desconocido y expansión de conciencia y después llegar a serlo. “Habiendo
impregnado el universo con una fracción de mí mismo, Yo permanezco”. Es lo
mismo.
AP: Lo importante y la única manera de crecer es enfocarse en el
siguiente paso, lograr esa expansión y construirla en uno mismo de la misma
manera que el alimento es asimilado en el cuerpo. Puedo perderme en la idea de
llegar a ser.
AAB: La iniciación logra siempre invertir esta tendencia. Lo que
usted realmente quiere decir es que usted no es consciente de lo que subyace
detrás. Y entonces tiene que demostrarlo actualmente en el plano físico, pero
usted nunca puede mostrar la extensión de lo que usted ha llegado a ser. Ellos
nunca lograron entender al Cristo. El iniciado nunca es comprendido. El
problema es que los antiguos estudiantes han hecho la iniciación mucho más
fácil de lo que es. La han hecho depender de la personalidad, lo que no es así.
Han estado tan preocupados con lo que el iniciado tiene que hacer que han
perdido de vista lo que ha de llegar a ser y con lo que ha de llegar a estar
identificado. El iniciado se convierte en un poderoso introvertido y al mismo
tiempo en un poderoso extrovertido.
R: Es una cuestión de estar integrado en un grupo como grupo.
AAB: Si, como los cinco sentidos. El momento en el que el niño
es iniciado en los cinco sentidos se convierte en un participante con los que
han desarrollado los mismos sentidos.
AP: El Templo del Rito Escocés en Washington tiene una
inscripción en la base del altar acerca de lo que es la iniciación.
AAB: Un discípulo trabaja siempre desde el punto de mitad del
camino: un iniciado siempre vuelve al centro del templo.
RK: Creo que si venimos a aclarar conclusiones, se puede
realizar un gran trabajo. Llegamos a ser magnéticos unos con otros y más
magnéticos con los grandes seres.
AP: Se convierte uno en un punto focal en la mente de Dios.
Llegando a ser, aquellos pasos iniciales – más y más me parece que todas esas
cosas son cosas de la cuarta dimensión, y todavía estamos en tres dimensiones.
Ustedes hablan de pasar a la vida y al amor. Tienen que avanzar en cuatro
direcciones en relación con todas esas cualidades a fin de tener una respuesta.
Algo hace clic y de repente te mueves recto hacia una sustancia o un
pensamiento totalmente nuevo. De la misma manera un catalizador causa cambio y
reorientación, y toda la masa cambia y se tiene una substancia nueva. El
diamante y el carbono tienen la misma substancia. Se produce un cambio de las
partículas. Algo así sucede espiritualmente cuando uno es iniciado.
RK: Vi lo que significa subir a la cruz. Subir a la cruz es
realmente, en esta cuarta ronda, recorrer cuatro vías a un mismo tiempo y hacia
una quinta.
VH: ¿Creen que si ustedes toman la iniciación entrarán en una
nueva dimensión?
AAB: Eso es muy cierto.